fondo

Psicología Adolescentes

Si tienes un/a hijo/a adolescente y sientes que algo no va bien, es normal que te surjan dudas. ¿Será solo una etapa? ¿Es grave o se le pasará con el tiempo? ¿Debería ir a terapia o es demasiado pronto?

¿Cómo sé si mi hijo/a adolescente necesita ayuda psicológica?

Es normal que en la adolescencia haya cambios de humor y momentos de rebeldía, pero si ves que tu hijo/a se aísla demasiado, está siempre de mal humor, pierde interés en lo que antes disfrutaba, tiene dificultades para dormir o comer, o notas conductas preocupantes (como autolesiones o consumo de sustancias), es importante prestarle atención.

A veces, los adolescentes no saben cómo pedir ayuda, y la terapia puede ser un espacio donde encontrar alivio y herramientas para sentirse mejor.

¿Y si no quiere ir a terapia?

Muchos adolescentes se resisten al principio porque sienten que pueden manejarlo solos o porque no quieren que “les analicen”. Es clave explicarle que la terapia no es un castigo ni significa que algo esté mal en él/ella, sino un lugar donde podrá hablar con alguien sin juicios, sin presiones y con total privacidad.

A veces, con una primera sesión basta para que se sientan cómodos/as y vean que no es lo que imaginaban.

¿Qué pasa si no me cuenta lo que le pasa?

Es muy común que los adolescentes dejen de compartir lo que sienten con sus padres. En terapia, tienen un espacio seguro donde hablar sin miedo a ser juzgados/as. Al sentirse comprendidos/as, es más probable que poco a poco también puedan abrirse más en casa y mejorar la comunicación contigo.

¿Cómo funciona la terapia con adolescentes?

El proceso comienza con una entrevista inicial con los padres para entender la situación y conocer sus antecedentes del desarrollo. Luego, el adolescente tendrá sesiones individuales donde trabajaremos sus emociones, pensamientos y comportamientos. Dependiendo del caso, también se incluirán sesiones familiares o pautas para mejorar la convivencia en casa.

¿Voy a saber todo lo que hable contigo?

La terapia es un espacio confidencial para ellos/as, pero eso no significa que te dejaré fuera del proceso. Si hay algo importante que debas saber, lo hablaremos de forma que respete su privacidad sin dejarte sin información. Además, os daré herramientas para que podáis acompañarle mejor desde casa.

¿Cuánto tiempo tomará notar cambios?

No hay un tiempo exacto, porque cada adolescente es diferente. Algunos se sienten mejor en pocas semanas, mientras que otros necesitan más tiempo para trabajar en profundidad. Lo importante es que el proceso se adapte a él/ella y que los cambios sean duraderos.

¿Cómo puedo empezar el proceso?

Si crees que tu hijo/a podría beneficiarse de la terapia, el primer paso es agendar una sesión inicial. Juntos/as exploraremos qué le está afectando y cómo podemos ayudarle a recuperar su bienestar.